¿Son rentables y productivos los esquejes de una planta madre autofloreciente?

Una madre autofloreciente es meramente imposible de mantener sin florecer. Las madres se las mantiene en crecimiento con 18 h. de luz. Las plantas autoflorecientes no respetan el fotoperiodo, florecen cuando les toca florecer tras ver finalizado su crecimiento total. (Lo cual mantener una planta madre autofloreciente es casi tarea imposible) Únicamente sería rentable los ciclos de revegetaciones,con pobres y vagos resultados. A continuación te explicamos por qué y en que consiste esta revegatición.

No es recomendable revegetar una planta más de una vez pues las cosechas suponen un fortísimo estrés que debilita a la planta, dando cada vez producciones menores y de peor calidad. Sin embargo, los esquejes que provengan de plantas revegetadas una única vez, tienen la posibilidad de expresar toda su potencialidad si las condiciones se lo permiten. (Cosa que la madre no haría)

• ¿En que consiste la revegetación? Dejamos algunas hojas, ramas y cogollos que servirán como base para la regeneración de la planta. Después de 4 meses de vida, la maceta acumula sales perjudiciales debido a los continuos abonados, por lo que realizamos un concienzudo lavado de tierra usando enzimas para limpiar bien el substrato y las raíces. Una vez realizado este paso, podemos cambiar el foto período a 24 horas de luz continuadas bajo un foco de 400 W. para acelerar el proceso regenerativo. A partir del segundo día después del lavado de tierra, podemos comenzar a abonar con algún fertilizante de crecimiento rico en nitrógeno con dosis suaves e ir aumentándolas paulatinamente. A los 10 días la planta mostrará signos de vida dando sus primeros brotes. Comenzará con hojas de un foliolo, luego de tres, llegando a su estadio vegetativo justo al revés que como entró al de floración, dando hojas de cada vez mas puntas.

Si se le propicia alimento a partir de este momento la planta mostrará un explosivo crecimiento para buscar un equilibrio entre su sistema de raíces y su sistema de hojas y ramas.

En menos de una semana empezaremos a ver las típicas hojas de cinco y siete puntas, signo inequívoco de que la planta ya goza de un crecimiento saludable. De los pequeños cogollos que dejamos, surgirán multitud de pequeñas ramas y nuevos brotes de crecimiento una vez crezcan con el resto de la planta. Luego podemos retirarlos para evitar que se conviertan en un foco de infección una vez sequen. A los 30 días se transplanta a un tiesto mayor, se le cortan algunos esquejes y se vuelve a pasar a floración

Plantar autoflorecientes regulares es más económico y productivo. Con un macho y una hembra tienes semillas autoflorecientes casi de por vida si sabes cuidar los periodos de ambas plantas. Es complicado pero es una realidad más probable que la revegetación.

Las autoflorecientes dan menos cantidad pero un mayor rendimiento concorde al tiempo de crecimiento y floración. Es la eterna duda, de si tener una producción más rápida y de menor cantidad, o unas plantas de crecimiento-floración normal con una cantidad más elevada. Lo que dejamos claro con esta información es que de plantas autoflorecientes, es complicado primero hacer madres, y luego sacar esquejes de manera continuada.